El miércoles 17 a las 21.30, se congregaron alrededor del
Puente Rosario-Victoria miles de espectadores deseosos de ver los fuegos artificiales tan
publicitados por la radio y la televisión. Una vez finalizado el show, otro
espectáculo se llevó a cabo frente al Monumento Nacional a la Bandera: un
extraordinario concierto de tango a cargo de un grande, una figura
maravillosa, llena de magia y pasión por la música, el maestro
Mariano Mores. A lo largo del recital se proyectaron sobre dos pantallas gigantes,
ubicadas a los laterales del escenario, imágenes del maestro junto a
importantes figuras del tango, tales como el
Polaco Goyeneche, Carlos Gardel, Astor Piazzola, Tita Merello, Libertad Lamarque, Aníbal Troilo,
entre otros. El show contó con la presencia de excelentes bailarines,
músicos, y la emotiva actuación de su nieto y su hija. Temas como
"Uno" y "Cuartito Azul" hicieron estremecer al público emocionado por la
participación de Mores y su familia.
El sábado, Rosario vivió un cierre a pura música.
Más de 50 mil personas se convocaron para ver a sus artistas favoritos
frente al Monumento Nacional a la Bandera. El espectáculo, organizado por
la Secretaría de Cultura de la Provincia, reunió desde referentes de la
trova rosarina hasta figuras clave del rock local, pasando por próceres de
la talla de Litto Nebbia, Luis Spinetta y León Gieco.
La apertura del recital estuvo a cargo de Jaime Roos, precedido por una
presentación de Quique Pesoa. Sonaron temas como "Los futuros murguistas",
"Amor profundo", y "El hombre de la calle", provocaron la adhesión de un
clamoroso público que no dejaba de acompañar con palmas y aplausos al
cantante. "Adiós juventud", en la voz de Emiliano Muñoz, no podía faltar.
La murga rockeada con el sello impar de Roos se destacó en
"Cometa de la farola", en "Que el letrista no se olvide", al que llamó
"un tema puro carnaval", y en el cierre bien arriba con "Colombina".
Adrián Abonizio y Sergio Muerto Sainz fueron fuertemente ovacionados tras
tocar "El témpano". El repertorio incluyó temas como "No me olvides",
"Corazón de barco", "Oración del remanso", que reunió muchas voces y
aplausos. Su autor, Jorge Fandermole, se subió al escenario para sumarse al
dúo.
Coki y The Killer Burritos produjo un quiebre a puro rock and roll. Algunos
de los temas interpretados por la banda fueron: "Perdida", "Linyera" y
"Perfume". Luego llegó "Baila", en una versión más tranquila, pero con el
mismo espíritu de aquel hit del recordado Punto G. Hacia el final Coki
interpretó una parte de "Viento, dile a la lluvia", de Los Gatos y generó
una gran emotividad entre el público presente.
Luego llegó el turno de Jorge Fandermole, uno de los compositores
argentinos más respetado en la música popular. Comenzó su concierto con
"Cuando", pero sobresalió con "Corazón de luz y sombra", "Canto versos" y
"Sueñero".
A las 21.30 se estimaba que había en el lugar unas 50 mil personas
presenciando una noche increíble.
Las bengalas comenzaron a adornar el recital cuando, Cielo Razzo, la banda
más convocante de Rosario, decía presente. Interpretaron temas como
"Estrella", de su último disco "Código de barras", y "Buenas", del álbum
homónimo. El furor llegó con "Luna", el hit más fuerte de la banda, que se
oyó cantar en un final a toda marcha y con una sostenida ovación.
Litto Nebbia también se hizo sentir en el escenario, regalando algunos de
los clásicos de su trayectoria en un momento irrepetible. El cierre tuvo
como protagonistas a Luis Alberto Spinetta y León Gieco, dos figuras claves
de la noche. Brindaron un impresionante show, lo increíble fue ver que el
público presente desde las cinco de la tarde se quedó hasta el final para
festejar junto a León sus 53 años. El final sin lugar a dudas fue realmente
emotivo, tanto para el músico como para los espectadores.