Vientre urbano Pintura instalación. Acrílico sobre tela.
16 x 3 m.
1994-1996
Sobre la obra, dice Fernando:
"La necesidad pasó por querer hablar de lo clandestino, lo que late detrás de las paredes, descubrir de pronto que debajo el asfalto hay un cuerpo viviente, solidario o no.
Esta serie se compone de trece pinturas de acrílico sobre tela de 1.50 x 1.40 m., que funcionan por separado (prueba de ello es que varias de ellas han recibido premios y menciones en diferentes salones del país). Pero en realidad la obra nació para ser montada como un gran mural, cuya medida es de 3 m. de alto por 16 m. de largo (tal como lo presenté en el Salón de la Biblioteca Argentina).
A la izquierda del mural, bolsas de basura hablan de un paisaje urbano cotidiano.
En el otro extremo, una bicicleta apoyada sobre la obra, habla del cuerpo ausente, fagocitado por esa maraña de caños, tuberías y artefactos."
Críticas a esta obra
"...el artista crea un ambiente gris, frío, ausente, donde paradójicamente el "alma" de la obra está colocada por fuera. El vientre urbano es un aparato mecánico, metálico, metódico. Ajenas, están la huellas del hombre: una bicicleta oxidada, un montón de basura."