Es un estereotipo instalado en el imaginario colectivo: la imagen del
artista frente a un lienzo, manchado de pintura, inmerso en un taller
desordenado, plasmando libre y espontáneamente su genio en la pintura.
Agregaría que el paradigma del artista visual parece ser siempre un pintor.
Herencia de la concepción romántica del arte. Seguramente. Construcción
imaginaria abonada por la bohemia en la que se gestó gran parte del arte de
las primeras vanguardias del Modernismo, nutrida hacia la mitad del siglo
por el Informalismo y la popularizada imagen de un Jackson Pollock
manchando literalmente el lienzo; vehemencia del demiurgo poseído por el
afán de expresión. El artista como chamán, como agente en el que se encarna
lo desconocido traducido por sus manos a la obra
(1).
La otra historia. Arte como ciencia
"Moove 36" y "Génesis", son obras del contemporáneo Eduardo Kac. Son
creaciones esquivas al disfrute de los sentidos, las sensaciones, la vista.
Si no se las comprende racionalmente - como se comprende una ecuación - el
espectador queda inerme frente a un conjunto de significantes pero ajeno a
la lectura de cualquier significado. Solo pensándolas, analizándolas se las
puede disfrutar como hecho artístico.
La obra de Kac es al mismo tiempo arte y ciencia. No basta verlas, es
necesario el concurso de la razón.
El arte conceptual en general, y la obra de este artista brasileño en
particular, tiene un nuevo estatuto formal y también apela a un nuevo
espectador.
Quien contempla una obra de soporte tradicional disfruta de lo que ve.
Puede que la mirada quede en la superficie. Puede que se haga una lectura
más profunda - hermenéutica - y vea se entrevea algo más que lo formal.
La obra que comulga con la ciencia se dirige a un público que se dispone a
resolver, como se resuelve un teorema. Hay de hecho una ecuación plantada
ante la vista del espectador. Pueda que resulte indiferente, pueda que se
condene como expresión de "arte". El espectador ya no es un expectante y
deberá analizar, la obra para que no se reduzca a una apariencia sin
sentido.
"Moove 36", como "Génesis", exigen comprender conceptos de genética,
códigos y mutaciones. Conocer el código ASCII con el que procesa
información el ordenadores y comprender cómo Kac traduce un código a otro.
Solo así la obra se abrirá como un paquete a la conciencia del espectador.
Arte/Ciencia/Tecnología.
Mientras Alba viva
La obra más espectacular de Kac, por ser "ejecutada" en un soporte vivo, es
la coneja "Alba". Alba es propiedad de INRA, el laboratorio de Avignon en
el que nace este pequeño ser transgénico que expuesto a la luz ultravioleta
se ve de color verde. El litigio en torno a los derechos de autor, entre
artista y laboratorio por la "obra", testimonia la dificultad de trazar hoy
un linde entre arte y ciencia. Hibridación en una "obra" en la que los
genes de medusa fluorescente se combinaron con los de un conejo. Arte y
ciencia algo más que una nueva disciplina de las artes.
"Dolly" la pionera oveja inglesa que mostró los alcances logrados por la
ingeniería genética, ya murió. Pero su nombre no se incluye entre las obras
de arte desaparecidas. "Dolly" fue un experimento patentado por la ciencia.
La futura muerte de "Alba", conmoverá al mundo artístico tanto o más que
al científico, supongo. Fenómenos de la hibridación tan cara a la
aleatoriedad y el estado "líquido"
(2) del mundo que protagonizamos.
De "Alba" a Pitágoras y Leonardo
El número, la geometría, asomaron en la abstracción que se impuso en la
Vanguardia de la primera mitad del siglo XX. Hacia la década del cincuenta
se evidenció la necesidad de experimentar con nuevos medios cinéticos y
lumínicos, como hibridación de arte con tecnologías mecánicas. Fue
necesario cálculo, proyecto, experimentación para llegar al logro de la
obra que se mostraba esquiva al criterio del arte como expresión sanguínea
y espontánea.
Las Nuevas Tecnologías usadas hoy en el Arte Electrónico, necesitan del
concurso del ingeniero, capaz de crear el software que mediante un proceso
matemático permita que la imagen que se haga visible mediante un ordenador
y un código binario. Número y un retorno a las fuentes pitagóricas.
Pero la presencia del número en la obra de arte antecede al filósofo
griego. La geometría y el orden racional de la imagen nos retrotraen a las
primeras sociedades agrarias neolíticas y a las primeras grandes
civilizaciones. Sin remontarnos tan lejos en el tiempo, el número - tal
como lo entendiera Pitágoras- gobierna cualquier obra del celebrado y
realista Renacimiento italiano: simetrías, composiciones ajustadas a
proporciones matemáticas, progresiones numéricas, rigen el orden de las
formas.
La summa de la perspectiva: "La Cena"
Como tantos, miré sin ver mil y una reproducción del fresco que Leonardo
pintó en el Convento de Santa María de las Gracias en Milán, "La Cena".
Pero una vez en el interior de lo que fuera el refectorio (comedor) del
convento, veo la obra por primera vez. Estoy en el centro de la sala, donde
se ubicaban las mesas de los monjes comensales. La precisión matemática de
la perspectiva usada permite la singular y extraordinaria sensación de que
la escena cobra vida en el refectorio, y no solo sobre una de sus paredes.
No es éste el típico trompe l'oeil que fue frecuente en el Renacimiento.
Leonardo pintó su fresco de modo tal que la perspectiva de la escena se
prolonga en la perspectiva de la sala, dando lugar a la ilusión de asistir
a la cena, de estar incluido en la ficcional escena. El superlativo
ejercicio de perspectiva calculado y plasmado por Leonardo - que ofrece la
sensación de una simulación virtual - permite preguntarse si aquello
realmente está pintado o está acaeciendo a la vista del espectador. Oficio,
cálculo, matemática aplicada. Pitágoras revivido en un Renacimiento que
desconfió de lo sensible y asumió que sólo en el número y en la certeza
matemática residía la belleza ¿Basta la mirada para comprenderlo? ¿Es
necesario conocer el pensamiento platónico para disfrutar de esa apariencia
y alcanzar la dimensión definitiva de la obra? No hay ejercicio oscuro de
un demiurgo, hay cálculo, precisión, análisis, número. La grandeza del arte
grande.
Percepción/razón
La vanguardia abstracta holandesa, con Mondrian como su más difundido
referente, tanto como la Vanguardia rusa y el paradigmático Malevich,
abrieron el siglo XX con el rigor del número. Entre nosotros, la escuela
rioplatense que se generó alrededor del uruguayo Joaquín Torres García
mostró la universalidad del rigor de lo constructivo y cómo el talentoso
uruguayo, que había bebido en las vanguardias europeas, coincidía con el
rigor geométrico de la América Prehispana. La exactitud geométrica del
Minimalismo, muestra la total vigencia del número en las estéticas
contemporáneas, en las disciplinas tradicionales, como en las Nuevas
Tecnologías.
Huyen hados y demiurgos, Románticos y Orfeos, el estro, el misterioso
genio. Quizá el demiurgo se esconde tras el número.
Escrito en la naturaleza
El universo orgánico que despliega la naturaleza se rige igualmente por el
número - caracoles que en su interior despliegan una espiral logarítmica,
cardúmenes que, formando un bloque, nadan construyendo en conjunto esa
espiral para eludir al predador, la sinergia que produce la simetría del
vuelo de las aves, la simetría axial del cuerpo humano, la simetría radial
de los cristales de hielo. Huelgan los ejemplos. La geometría de fractales
pudo medir dimensiones infinitesimales y descubrir que en lo aparentemente
"orgánico" y aparentemente ajeno a la geometría, estaba presente el número.
Antes, mucho antes de que un ordenador lo constatara.
Los primeros templos erigidos a los Dioses fueron perfectos círculos de
piedra (como los Stonehenge) y se honraba a antepasados, soberanos y
fuerzas del destino, con círculos, pirámides y líneas como las de Nazca,
solo comprensibles por medio del complejo estudio de la escala y del
número.
Del Neolítico a Pitágoras, del Renacimiento a "Alba", "Todas las cosas que
se conocen tienen un número: sin el número no sería posible conocer o
pensar nada" (Filolao, S.V a.C).
Aclaraciones:
-
Confío que no se interprete que el Informalismo o cualquier otro movimiento fundado en la pura expresión está aquí minusvalorado. Lo propongo como antinomia.
-
Tomo el término prestado del sociólogo alemán Zygmunt Bauhman, que usa el concepto de "líquido" para definir las conductas y características de la sociedad contemporánea.